
Ya no sé si bajamos la tercera ola o subimos la cuarta, pero no puede quedar mucho, ¿verdad? … Con vacunas o sacando el Cristo en procesión la pandemia de marras debería ir ya de baja. Nos lo creeremos, aunque sea para no volvernos locos, mantener la fe en que la economía se recuperará y evitar que lo enviemos todo a freir espárragos.
Como ya estamos saliendo a navegar, que es lo que más me gusta, no me tomo tan a pecho el espectáculo lamentable de nuestros representantes incapaces de formar gobierno, el esperpento de la campaña madrileña, Bosé desbarrando o el drama de la Rociíto haciendo subir la audiencia. Por fin, pasados los fríos, las restricciones y los confinamientos comarcales, en Semana Santa reanudamos los cruceros del velero Onas. Después de tantos meses amarrados estrenamos la primavera con dos traviesas sucesivas por la costa Catalana desde el puerto de Badalona.
Esta que empieza será mi temporada consecutiva número veintiocho. Ahí es nada. En tantos años he compartido aventuras con miles de tripulantes. Todos han dejado su recuerdo. Muchos se han convertido en asiduos, otros vienen de vez en cuando, algunos hace tiempo que no los veo. El primer viaje de semana santa lo compartimos con dos parejas que habían navegado habitualmente en el velero Onas, en el Atlántico y por todo el Mediterráneo, hasta que las obligaciones familiares les obligaron a quedarse en tierra. Este año las «obligaciones familiares» tenían suficiente edad para disfrutar de la vida a bordo, volvieron a embarcar en una plácida navegación familiar, tranquilamente hasta la costa Brava. Durante cinco días aprovechamos las mejores horas para navegar y recalar en un puerto diferente cada día, con tiempo para ir a la playa, disfrutar de los primeros baños de la temporada (la más valiente) o cocinar una calçotada en el velero. Un muy feliz reencuentro.
En la segunda travesía de semana santa navegamos hacia el sur en condiciones menos apacibles pero muy buenas para disfrutar de la vela. Con una estrategia cuidadosa y un poco de suerte pudimos sacar el máximo partido a una situación meteorológica plenamente primaveral. Navegamos hasta el Delta del Ebro en una larga singladura a vela, anclado en las bonitas y desconocidas calas del sur y remontamos la costa Daurada y el Garraf, aprovechando al máximo las horas de luz y el viento de mistral, favorable y benévolo, que se convirtió en un potente garbí en la recalada final en Barcelona.



Debido al aumento de los casos de Covid-19 después de semana santa el Procicat volvió a imponer el confinamiento comarcal. El mes de abril hemos seguido navegando casi todos los fines de semana, respetando las limitaciones, y estamos realizando un Curso de vela de crucero. Desde el lunes 26 de abril podemos volver a navegar por toda Catalunya y esperamos que nos acompañes cada fin de semana para disfrutar del mar, la vela y la vida a bordo del velero. No te despistes, quedan muy pocos fines de semana con plazas disponibles. En junio teníamos pensado hacer dos travesías de catorce días hacia Córcega y Cerdeña, pero en Francia e Italia la situación no es muy buena y las medidas tomadas por los gobiernos son aún más restrictivas que en nuestro país. Dada la incertidumbre de la situación y la falta de vuelos pienso que es mejor cambiar de planes. Te propongo dos travesías por todas las islas Baleares y Columbretes, en la mejor época del año para navegar a vela y conocer sin prisas Columbretes, Ibiza, Cabrera, Mallorca y Menorca sin aglomeraciones.
No soy el único con ganas de zarpar. Los viajes de julio y agosto en Menorca o Mallorca continúan llenándose rápidamente y algunos están completos. No esperes el último momento para hacer tu reserva.
Gracias a todos los tripulantes por venir a compartir el placer de navegar y vivir a bordo de un velero a pesar de las dificultades y los miedos. Continuaré trabajando para que tus vacaciones a bordo del velero Onas sean un éxito. No sólo preparando cada singladura hasta el último detalle o priorizando la seguridad de los tripulantes y la embarcación. También, tomando todas las medidas razonables para que el velero Onas sea un entorno libre de transmisión de la Covid 19. Cuento con tu comprensión.